Mañana comienzan las pruebas de atletismo en los Juegos Olímpicos de París. Por delante, quedan 11 días de competiciones atléticas, hasta que se dispute el maratón olímpico (masculino y femenino), los días 10 y 11, respectivamente.
Hasta que llegue el día, cada uno hace sus apuestas. Aunque todo el mundo habla de ellos. El próximo día 10 a las 8 de la mañana todos los ojos estarán puestos en dos corredores: Kenenisa Bekele y Eliud Kipchoge. Faltará un tercer mosquetero en esta batalla. El malogrado Kiptum, quien sufrió un accidente que le quitó la vida el pasado 11 de febrero. En la memoria de todos ha quedado ese récord del mundo, ese 2:00:35 conseguido en el maratón de Chicago de 2023.
Pero París no será una prueba de récord. Ni mucho menos. 874 metros de desnivel acumulado durante los 42,195 kilómetros harán difícil (por no decir imposible) que se rompa la barrera de las 2 horas. Y más teniendo en cuenta que el temido Muro en París tiene nombre propio: Chaville (Km 28-29). Así pues, el maratón olímpico será para el más fuerte (de piernas y de mente), porque se esperan temperaturas de hasta 36 grados. Lo que no sabremos hasta ese día es si será el experimentado Bekele o Kipchoge, quien pretende conseguir su tercer oro olímpico consecutivo. O si, por lo contrario, los Kipruto, Mutiso, Geay, Lemma se colarán en la batalla por el triunfo en la Explanada de los Inválidos.
Un recorrido histórico
El circuito del maratón olímpico es una ruta de ida y vuelta entre París y Versalles similar a la Marcha de las Mujeres de la Revolución Francesa (octubre de 1789), en la que los parisinos, liderados por mujeres, se levantaron en armas reclamando libertad al monarca Luis XVI. El día 10, 81 corredores serán los que promuevan su propia revolución en busca de la victoria. ¿Quién ganará?
